El agobiante bochorno político

Al igual que el calor agobiante que nos azota en esta época estival, es agobiante la presión que desde todos los ámbitos de la política nacional se ejerce sobre la lógica, la razón y el bien-ser.

Por un lado viene esa chica a la que debieran detectar en su filas todos aquellos que cada día se ganan su pan con el sudor de su frente y el dolor de sus riñones, y que aspiran a un mundo el que no se someta al débil, por el poder del fuerte, en función de la necesidades del primero y los caprichos del segundo. Esa chica que responde al nombre de Leire, y que a la hora de ejercer su papel de azote dialéctico, ( porque pretenden perpetuar las dos Españas de las que hablaba Antonio Machado) contra la oposición por el caso Gürtel, se olvida de mirar dentro de su casa, sobre esas ayudas púbicas que ha recibido una empresa por trabajar en ella la hija de Manuel Chavez, hija que sin experiencia previa cobra un suculento sueldo mensual, que supera lo que muchos braceros cobraran en casi un año de sacrificado e inseguro trabajo, y que para mas sarcasmo depositaran el voto en favor del partido de esta señorita. O sobre esas inversiones del Ayuntamiento de Sevilla en el Caribe para avistar delfines, cuyo proyecto lidera una empresa de Gustavo Cineros, aquel al que el Psoe regalo Galerías Preciados, por las que ganó en meses varias decenas de miles de millones de pesetas. A Leire no le sorprende, ni aprecia nada anormal en el sueldo de esta hija de Chavez, no le parece inmoral, porque ella misma jamás ha sufrido en carne propia la necesidad, ni la fatiga del esfuerzo continuado, ni la competencia para el acceso a un puesto de trabajo, lejos de la excelencia, su carrera es la carrera de la afinidad política, su competencia esta lejos de esfuerzo por la mejora constante, sino que se adentra en el fango de la de arbitrariedad en la defensa del PARTIDO, como merito para cobrar de las arcas públicas, sueldos que están muy por encima de los ingresos de muchos empresarios. Pajín no te las hagas …. metales, que muchos saben, que algún cargo de lo mas insignificantes de tu partido, recibe enseres en sus domicilio, cuyo pagos les seria difícil demostrar, por haber sido regalos de empresas que luego consiguen contratos contratos con la administración. Deje su tono mitinero para adentrase en el terreno de lo razonable, de lo creíble.

Por el otro lado, la señora alcaldesa de Valencia, Rita Barbera, que viene a acabar de enfangar la política nacional, diciendo en términos populares que MAL DE MUCHOS CONSUELO DE TONTOS. Nos dice que todos reciben regalos y pretenden darle categoría de razonable al recibo de dádivas por parte de los políticos en función del número de estos, que lo reciben. Es en función de esa práctica habitual, por la que se pretende dar categoría de normalidad y bondad ética a estos actos. En definitiva Rita Barbera quiere decirnos que la bondad o la maldad de los actos no se asienta en el hecho intrínseco de los actos, sino en el número de quienes los practican, y si la mayoría practica la violación en masa, como los hechos descubiertos en estos últimos días, habría que darle la sanción social correspondiente de bondad. Algunos ha hecho descender a la democracia hasta las cloacas, y pretenden que todos les avalemos en tamaña hazaña.

Decía el recio castellano de Onésimo que serian preciso 10.000 jóvenes llenos de arrojo y decisión para barrer del escenario nacional la voz de los farsante y los traidores, pero me temo que los jóvenes no perciben esa necesidad porque no atisban en sus pituitarias el olor a podrido de la sociedad que les va tocar sufrir. Cuando lo sientan, será demasiado tarde para romper las ataduras con las que el sistema les amarrará en la inmovilidad y el silencio. Están más preocupados por el botellón que por tomar con la voz, y la palabra las riendas de su futuro.


Contra el calor tenemos esos aparatos refrigeradores que nos proporcionan el bienestar que del que nos priva la propia naturaleza. Pero contra el agobio y la impotencia, que nos proporcionan las Ritas y Pajines de turno, a las que se jalea desde el fondo norte o desde el fondo sur, y que sufren los que se sientan como espectadores expectantes en los laterales del terreno de juego, y que juntos con los que ya ni siquiera acuden al campo, son mayoría, no existe sosiego, ni motivo para la esperanza, fuera de lo que cada uno sea capaz de generar desde su intima firmeza y compromiso contra esta barbarie disfrazada de modernismo, y de progresía en la que se esconde la zafiedad, y lo mas antiguo de lo superficial del mundo de los sentidos, las ambiciones y el egoísmo. Firmeza y compromiso que son hoy por hoy, ni más ni menos, que la supervivencia de la LIBERTAD en un terreno en el que sabemos que nos apuntan muchos francotiradores con cargo al presupuesto público.
MACHACANDO LAS ALMENDRAS